Uranio empobrecido, el

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Forest, Eva (Coord.)
9788489753631 – HIRU – 2001 – 152 páginas /orri.

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Descripción

 

 

 

 

DOS TEXTOS PARA UNA MISMA REALIDAD ᅵY si ocurriera que, en realidad y aunque no nos percatᅵsemos de ello, estamos sometidos a una permanente propaganda de guerra que, en todas las cuestiones de nuestra vida cotidiana nos dice no sᅵlo lo que tenemos que hacer y pensar, sino tambiᅵn lo que tenemos que sentir, padecer y gozar? ᅵY si ocurriera que esa propaganda diaria de guerra fuera tan perfecta, sutil, adaptable y flexible que no se percibiese a simple vista, o sea fuera invisible e imperceptible en sus formas pero no en su contenido y menos aᅵn en sus efectos inhumanos? ᅵY si ocurriera que, por poner un ejemplo, esa invisible propaganda diaria de guerra ha logrado tambiᅵn, como en otros muchos casos, hacernos creer que no ha existido el uso militar del uranio empobrecido como, segᅵn juran y perjuran los EE.UU nunca ha existido la guerra biolᅵgica contra la agricultura y la economᅵa cubana? ᅵY si ocurriera que no sᅵlo se trata de la ocultaciᅵn del empleo del uranio empobrecido sino tambiᅵn de la ocultaciᅵn de experimentos en vivo de potentᅵsimas drogas con humanos vagabundos para poder aplicarlas luego en defensa del estado y de su democracia? ᅵY si resultara que….? Estas y otras muchas interrogantes me he hecho yo mientras leᅵa dos excelentes libritos de bolsillo, de esos que usᅵbamos antes y que ahora apenas existen, y que analizan dos cuestiones en apariencia muy distantes entre sᅵ pero muy relacionadas en la realidad. Porque ᅵquᅵ tiene que ver la propaganda de guerra con el uranio empobrecido? A simple vista, nada o muy poco, tan poco como que la OTAN anda de por medio. Y cuando digo que es poco el que la OTAN ande de por medio es que en mᅵ ya ha hecho efecto la propaganda de guerra de la OTAN pues uno de sus objetivos es precisamente ese, el de reducir la OTAN, esa mᅵquina de muerte y opresiᅵn, a una naderᅵa o pero aᅵn, a un «instrumento de defensa de la paz y de la democracia». Sin embargo, hay mᅵs que eso, pues una de las conexiones
entre ambos temas –la propaganda de guerra y el uranio empobrecido– es el papel de la prensa, de los gabinetes de prensa de los ejᅵrcitos y gobiernos, de las grandes corporaciones del complejo industrial-militar, Estos y otros poderes mienten con bellaquerᅵa y cinismo para ocultar dichas relaciones. Pero el problema es mᅵs serio e inquietante porque quien usa uranio empobrecido y otras armas de nueva o vieja tecnologᅵa -recordemos que los EEUU han anunciado el reinicio de la guerra biolᅵgica ademᅵs de la guerra de las galaxias- es tambiᅵn capaz de emplear otros recursos letales o destructivos a diversa escala y selecciᅵn de objetivos. En resumen y para acabar, de entre las muchas que he sacado de ambos libritos excelentes sᅵlo puedo citar dos: una, es que del enemigo hay que esperar siempre lo peor y por tanto hay que prepararse para ello. La razᅵn es muy simple pero demoledora y consiste en que por debajo de los cambios, aᅵadidos y mejoras en sus sistemas de brutalidad y agresiᅵn, lo que los estructura y guᅵa, es una lᅵgica implacable que ya fue enunciada y desarrollada con mucha antelaciᅵn, y que posteriormente ha sido mejorada pero nunca negada ni abandonada. Esa lᅵgica aparece en el librito «Principios elementales de la propaganda de guerra», maravilloso texto de actualidad innegable. La otra es que a pesar de todos sus esfuerzos, gastos e inversiones multimillonarias en nuevas tecnologᅵas de muerte, no consiguen acabar con la vida, con la crᅵtica cientᅵfica y objetiva, con la prᅵctica democrᅵtica y revolucionaria. Esa lecciᅵn imprescindible aparece en el librito «El uranio empobrecido», un ᅵgil y vibrante texto que nos remite a la constante humana de no aceptar la opresiᅵn. I??AKI GIL DE SAN VICENTE