Descripción
Quienes se acerquen a este libro se encontrarán con un poemario dividido en cuatro partes, más un cierre en el que lo escrito se relaciona en ese caso con la pintura de Michel Martínez Vela.
Es la primera sección la más extensa y la que da nombre a todo el libro. En ella, se habal de la vida, de que es necesario arriesgarse, atreverse; siempre con cuidado de no hacer daño ni a los demás ni a ti, hay que dar pasos adelante, no quedarse en esto no me sale, o en el igual esto no gusta.
De ahí se pasa a Accede al milagro, y el erotismo hace acto de presencia. El tener esas sensaciones para mí es interesante, necesario»,
Aparece entonces Respeta el cosmos y la naturaleza se hace protagonista. Respeta el cosmos dentro del libro. «Sí, soy urbanita pero no puedo vivir sin salir, andar, caminar» por barrios, parques, montes y lo que se tercie, sin aquello que el ser humano actual tiende a olvidar o menospreciar de manera tan habitual.
El cierre llega con Sentencia al opresor, donde entre la denuncia de las guerras y de las injusticias, tiene un peso específico la puesta en valor de la mujer, de sus luchas, de la necesidad de libertad, poniendo el foco de manera especial en aquellas más desprotegidas, las que no tienen hogar. «Parece que solo existen los hombres sin techo».