Descripción
La noche del 27 de febrero de 1933, Marinus van der Lubbe (Leiden, Holanda,1909-1934), joven obrero en paro, agitador revolucionario y comunista consejista, es detenido por la policía en el interior del Reichstag después de que hubiera iniciado varios focos de fuego. Aunque Marinus van der Lubbe asume su acción de inmediato como un acto de propia iniciativa y con un marcado carácter anticapitalista, el incendio del Reichstag se convierte desde el primer momento en un caso flagrante de manipulación interesada y de tergiversación histórica. A ello contribuyeron tanto los nazis, que lo imputan a los comunistas, mediante el montaje de un proceso-farsa a la medida de sus intereses propagandísticos y represivos, como los propios comunistas, socialdemócratas y liberales que, contra toda evidencia, desarrollan una intensa campaña internacional sobre la base de una versión del incendio del Reichstag funcional a los intereses coyunturales del antifascismo y de la política del Frente Popular dictada por el Komintern. De ese modo se procedió a una feroz campaña de mentiras y de manipulación de hechos y circunstancias, así como a la difamación sistemática de Marinus van der Lubbe, de su persona y de su vida de militante revolucionario. Resultado de todo ello ha sido la consolidación de una falsificación histórica que ha hecho fortuna hasta el presente. La pormenorizada investigación realizada por Nico Jassies, al poner las cosas en su sitio y proceder precisamente a restablecer la verdad sobre la autoría e intención real del incendio del Reichstag, constituye un necesario acto de desagravio histórico y de homenaje a la figura de Marinus van der Lubbe.