Descripción
El deporte no quedó al margen de los cambios sociales de la Europa de Entreguerras propiciados por el movimiento obrero. En Cataluña, los debates en torno al potencial emancipador de la práctica deportiva tuvieron especial virulencia en la prensa libertaria, donde quedaron reflejadas las distintas posturas a propósito de la conveniencia de que los anarquistas asumieran el deporte como otro espacio de intervención política más.
Con el estallido de la Guerra Civil, el proceso revolucionario desarrollado en la retaguardia antifascista contribuyó a la socialización de la economía, favoreciendo el control sindical de espectáculos deportivos, como el boxeo, que hasta entonces habían sido lucrativos negocios. Será precisamente en este convulso contexto donde nazca el Sindicato de Managers y Boxeadores Profesionales de la CNT, cuya fugaz y turbulenta historia se aborda en la segunda parte de este trabajo.