Descripción
La tendencia, afortunadamente cada vez más en declive, de querer ver en los testimonios literarios de la Antigüedad como una suerte de “Biblia” a la que acudir para reconstruir una imagen precisa, inequívoca y atemporal de las realidades étnicas presentes en la península ibérica y sus respectivas plasmaciones geo-cartográficas ha llevado a forzar los datos, descontextualizándolos.
El recurso a tachar de compilador o simple transmisor a determinados autores o la proyección de esquemas de nuestro presente para intentar comprender realidades del pasado han sido utilizados, en más ocasiones de las deseadas, para explicar las incongruencias o los errores en los que incurrieron los distintos autores que volvieron su mirada hacia el extremo occidente.
El libro que el lector tiene entre sus manos es un intento de romper, de manera definitiva, con este planteamiento epistemológico que, en la historiografía hispana, tuvo su máximo exponente en las Fontes Hispaniae Antiquae. Así, la autora, partiendo de un amplio corpus literario que se extiende, cronológicamente, desde las primeras referencias a propósito de Tartesos y el estrecho de Gibraltar hasta los locorum nuda nomina de Plinio, ha procurado no tratar estas referencias como datos asépticos y objetivos, sino como informaciones insertas en obras que escapan a los cánones de nuestros géneros literarios actuales.
De manera paralela, este análisis se ha llevado a cabo teniendo en mente la premisa de que todas estas producciones literarias son también, y, sobre todo, productos culturales que son el reflejo de ideologías y contextos políticos muy concretos de los que no pueden ser aisladas. En sus líneas hay, en consecuencia, una elección, no juzgamos si correcta o no, por parte de su autor quien, en muchos de los casos analizados, escribe con un ojo puesto en la tradición y con otro puesto en las realidades que está viviendo o les están llegando. Solo así podremos entender, explicar y recurrir al rico corpus etno-geográfico referido a Iberia-Hispania.