Descripción
El discurso es ya un acto que trata de lograr que cese el estado de cosas actual. Los economistas de cabeza hueca dictan leyes sobre todos los continentes. El planeta es inexorablemente devastado. Su persistencia y su vitalidad relativas dependen, en gran parte, de nuestra incapacidad de redefinir un proyecto y de las prácticas de liberación. Llamamos comunismo al conjunto de las prácticas sociales de las transformaciones de las conciencias y de las realidades a nivel político y social, histórico y cotidiano, colectivo e individual, consciente e inconsciente. Realizar otro discurso sobre lo existente puede alimentar sus destrucción.